Los detectores de radar lo podríamos clasificar en dos grandes grupos, los de instalación fija y los portátiles. Como veremos a continuación cada grupo tiene sus ventajas y sus desventajas, por lo que si queremos buscar un detector, antes de nada tenemos que plantearnos nuestras necesidades para determinar cual de los dos tipos de detectores nos conviene.
DETECTORES FIJOS:
Surgen como respuesta a la necesidad de los fabricantes de automóviles de poner freno a las radiaciones solares que entran en el habitáculo del vehículo y producen el calentamiento del interior del mismo.
Debemos saber que la luz del sol podemos dividirla en radiación visible, radiación infrarroja y radiación ultravioleta. Los dos primeros tipos de radiación producen el calentamiento en el interior del habitáculo, puesto que la energía se concentra mayoritariamente en los dos primeros tipos de radiación.
Son varios los factores que afectan a la distancia de detección en el empleo de un detector de radar en España y ciertos países europeos, motivado por el hecho de que la señal que percibimos es el rebote de la enviada por el radar, en los objetos que existen en la vía, en otros coches, en el guarda-rail, etc. Estos factores en USA al apuntar directamente al coche (y a la antena) no son tan importantes.
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